Descripción
Salamanca, Ignacio Montero, Ca. 1753. Oro fundido y cincelado
Se trata de un cáliz rococó, con abundante decoración en la que se combinan motivos jacobeos con simbología eucarística, elementos alegóricos y vegetales. Debe su nombre al canónigo Andrés de Gondar, que ocupó el cargo de Chantre y que fue uno de los más destacados representantes del cabildo ilustrado de la época. Así mismo, este canónigo tuvo un papel destacado como mecenas y amante de las artes, dotando a la catedral de importantes donaciones, entre las que se encuentra esta pieza, de factura salmantina, aunque probable diseño compostelano, regalada, como consta en la inscripción de su base, en el año 1753.