Escultura y elementos arquitectónicos
El conjunto catedralicio de Compostela, tal y como lo vemos hoy, es el resultado directo de siglos de construcción y añadidos que fueron creciendo acordes a las necesidades y los usos que cada época traía consigo. En el Museo se consiguieron reunir piezas de partes que habían desaparecido tras reconstrucciones, revestimientos y distintos proyectos. Ejemplo desto son los restos de la antigua fachada del Paraíso, sustituida en el siglo XVIII por la actual de Azabachería; o el coro pétreo y la fachada exterior del Pórtico de la Gloria, ambas obras del Maestro Mateo.
De siglos posteriores destacan obras como el coro de madera que sustituyó al mateano en el siglo XVII o el retablo de las Reliquias, desaparecido en el incendio de 1921.