Historia Pinxit
Presentación

Presentación

La Fundación Catedral de Santiago, con el soporte de la Deputación provincial da Coruña, ha desarrollado en el año 2024 el proyecto Historia Pinxit. Espazos, temas e personaxes na pintura da catedral compostelá, centrado en el estudio, catalogación y difusión de una de las colecciones catedralicias menos conocidas pero que permite realizar, a través de los ejemplos conservados, un completo recorrido por la historia de la pintura en Galicia desde la Edad Media hasta época contemporánea con ejemplos destacados procedentes de encargos, legados, donaciones y adquisiciones realizadas por la Iglesia compostelana a lo largo de los siglos.

La época medieval se centra principalmente en las miniaturas de los códices iluminados conservados en el Archivo catedralicio, entre ellos, el Tumbo A o el Códice Calixtino; así como en algunos testimonios de pinturas murales de conjuntos desaparecidos con el paso del tiempo, caso de la Torre del Arzobispo Gómez Manrique.

El siglo XVI, iniciado en maestros de tradición hispano-flamenca supuso la llegada del Renacimiento, con interesantes pinturas murales conservadas en algunas capillas de la catedral, caso de Sancti Spiritus, Prima o San Pedro; junto con ejemplos autores como Maestre Fadrique, Pedro Noble o Sixto de Frisia, hasta llegar al manierismo con las piezas del aragonés Juan Baustista Celma; o con piezas especialmente singulares como el Gallardete de Lepanto.  De esta época también aparece la pintura en documentos conservados en el Archivo, caso de bulas, privilegios y ejecutorias.  

La época barroca y su epílogo clasicista cuentan con las destacadas figuras de quienes, tradicionalmente, han sido considerado los dos grandes pintores de la catedral compostelana: Juan Antonio García de Bouzas y Gregorio Ferro, pero también se cuenta con piezas de algunos de los discípulos del primero, en torno al cual se configuró una primera hornada de pintores compostelanos, entre ellos Manuel Arias Varela, Domingo A. de Uzal o Couselo del Villar. Junto a ellos, se hallan interesantes ejemplos de pintura internacional, con maestros como Guido Reni o el mexicano Morlete.

Por fin, el período contemporáneo se inicia en plena crisis de la ciudad de Santiago, a mediados del siglo XIX, con algunos encargos para reformas de espacios de la catedral y vive su momento culminante en las últimas décadas del siglo XIX y primeras del XX de la mano de un acontecimiento excepcional, como fue el redescubrimiento del sepulcro apostólico en 1879, que permitió el resurgimiento de las peregrinaciones jacobeas y de artistas compostelanos como Modesto Brocos, Juan Luis o Tito Vázquez que se encargaron de realizar piezas relacionadas con esa revitalización de Compostela. A ellos se ha sumado recientemente un gran maestro de la pintura como Raimundo de Madrazo, quien para su primera obra documentada eligió, precisamente, una escena de la tradición jacobea.

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