El Pórtico de la Gloria es la demostración perfecta de la maestría técnica y riqueza artística que presenta la Catedral de Santiago de Compostela. Fue construido entre 1188 y 1211 como broche final al proyecto que el Maestro Mateo ideó tras ser elegido de forma definitiva por el monarca Fernando II para terminar las obras de la catedral en 1168. El Pórtico de la Gloría recibía a los peregrinos tras su largo viaje y su mensaje no se queda solo en este espacio, sino que se complementa con su cripta y tribuna. Es la entrada occidental de la catedral románica que interpreta en piedra los pasajes del Apocalipsis y se considera una obra cumbre del arte universal. La visita permite conocer además, el resultado de la restauración, que se realizó con el mecenazgo de la Fundación Barrié.
La entrada al Pórtico de la Gloria incluye la visita completa al Museo (Colección permanente, Palacio de Gelmírez, Cripta del Pórtico y exposiciones temporales).